La amatista ayuda a aliviar dolores, ya sea por tensiones físicas, psicológicas o emocionales. También se cree que fortalece el sistema inmunológico, circulatorio y nervioso. Potencia las capacidades mentales, como la memoria, la concentración, el aprendizaje y el razonamiento.
Es una piedra calmante natural que alivia el estrés y la tensión, calma la irritabilidad, equilibra los cambios de humor, disipa la ira, la rabia, el miedo y la ansiedad. Activa la conciencia espiritual y abre la intuición.
Además transmuta energías negativas.